El maíz

Hace muchos, muchos años, nuestros antiguos dioses decidieron crear al hombre. Inmediatamente después de esta maravillosa creación los dioses encomendaron a Quetzalcóatl buscar el sustento de la humanidad. Dicen los Viejos Abuelos que convertido en hormiga roja, Quetzalcóatl siguió a una hormiga negra que sacaba de un hoyo de la tierra un grano de maíz y así descubrió el cerro del sustento donde estaban guardados todos los nutritivos granos que ahora nos alimentan.

Para dimensionar la importancia del maíz para nuestra raza es preciso partir desde el significado de su palabra. Maíz, es un vocablo propio de los indios que habitaban en la zona del Caribe y significa “lo que sustenta la vida”.

Las primeras plantaciones de maíz se realizaron en México y desde allí se expandió hacia el resto del territorio americano. Estudios arqueológicos realizados en el valle de Tehuacán demostraron que el maíz es cultivado desde hace 7 mil años, época en la cual los primeros habitantes fueron capaces de recolectar y plantar las semillas.

El maíz es pues el cultivo más importante de México por varias razones: se producen alrededor de 18.2 millones de toneladas en una superficie de 8.5 millones de hectáreas y es el que presenta un mayor número de productores, 3.2 millones, en su mayoría ejidales (solo existen 4 millones de productores agrícolas en el país).  Alrededor del 90 por ciento de la producción es de maíz blanco y se destina al consumo humano. 
A partir de la entrada del TLC las importaciones de maíz provenientes de Estados Unidos han ido en aumento llegando actualmente a una tercera parte de la producción nacional (6 millones de toneladas). Casi en su totalidad es maíz amarillo y destinado supuestamente al consumo. 

Lamentablemente en Estados Unidos la tercera parte de su producción es de maíz modificado genéticamente (transgénico). Por lo que entonces México está siendo inundado de maíz transgénico, siendo afectados principalmente los campesinos pero también a la sociedad en general. 

La vida misma de millones de mexicanos de hoy tiene como raíz y fundamento al maíz, eje para la creatividad cultural de cientos de generaciones y base de las manifestaciones culturales más variadas.